Tanzania

Este veranito el CM2 y el PVC (yo mismo) nos hemos marcado el viajón de nuestras vidas, hemos arrascao los bolsillos hasta conseguir unos miles de eurillos y nos hemos ido a Tanzania. En un momento tan señalado en nuestras vidas no podían faltar nuestras electónicas compañeras de doble pantalla...

Los elefantitos tienen la insana costumbre de comer unos 300 o 1000 o más kilos de verdura al día. Y resulta que cuando no encuentran suficiente, se dedican a tumbar los arbolitos para zamparse las hojas. Estábamos dando un paseo con el lanrove cuando un elefantón decidió atravesar nuestro carril con una acacia y ponerse a comer. No teníamos ganas de gresca, así que le dejamos comer y nos fuimos pa otro lao.

Otro día, dando una vuelta por el Serengeti, nos encontramos unas leonas (leonas de las leonas, no de las humanas) y estuvimos coqueteando con ellas una horita. Al final no nos comimos na (menos mal porque teníamos las de perder juas juas).

En nuestro último día de salvajismo africano nos tomamos esta instantánea junto a unas simpáticas cebritas, al norte del Serengeti donde la llanura sin fin empieza a ser montaña joía.