Creo que el peor día de mi vida será cuando el pequeño Jairo me de lecciones de conducción en el Mario Kart (ahora mismo solo se lo permito a PVC y a Fredigato -solo en unas carreras sí y otras no-). Y el día que se acerque a mí y me diga: "¿te la paso?". Uf! Eso puede ser terrible. De momento está hecho un máquina con el Pictochat. Juega hasta en el piso de la playa! (La Antilla, gracias abuela!!!). Yo creo que no le voy a decir que se deben hacer turbitos en las rectas, que lo descubra él solito! Bueno, ni eso... ni el truco de Pesc... ni el de las nubes... ni... shhhh!